La relación entre la oración y el tener un buen día de trabajo
Puesto que la armonía en todos los aspectos de la vida es algo fundamental para el ser humano, descubrir la relación entre la oración y el tener un buen día de trabajo se establece como una oportunidad de bendición trascendente que además de abrir espacio para la motivación y el buen manejo del estrés, nutre la relación de confianza y misericordia con el Padre.
Así pues, las oraciones para empezar el dia o cualquier otro tipo de plegarias que ayuden a encomendar el desarrollo de la jornada a la Divina Trinidad, se establecen como favorecedoras herramientas para salir de casa dispuesto física, mental y emocionalmente a protagonizar una fecha enmarcada por los valores morales instaurados a través del ejemplo de Jesucristo, los cuales por supuesto atraerán la prosperidad y las buenas decisiones.
Orar para bendecir el día de trabajo
Se requiere de humildad y sencillez de corazón para dirigirse al creador con la intención de bendecir el día de trabajo puesto que existe la errónea concepción de que podemos hacerlo todo solos. Con una oración de por medio resulta mucho más fácil disfrutar de fuerzas renovadas y una mejor disposición para la relación entre superiores y compañeros, esto debido a que la comunicación con Dios engrandece el alma y permite restarle importancia a lo terrenal.
Pedir la intervención divina para llenarse de constancia, poder de convicción y en general de la actitud precisa para cumplir con las labores esperadas debe ser un hábito del creyente ya que es la protección del Señor la que actúa para que en compañía de nuestro esfuerzo puedan ocurrir esas grandes cosas que se traducen en objetivos y metas.
Antes de ir a trabajar, ora
Dejando de lado las acostumbradas plegarias que recitamos una y otra vez, destinar tiempo para orar corresponde a un momento en calma donde la reflexión y la meditación son las protagonistas y esto es determinante para alejar las malas vibraciones que suponen las acostumbradas angustias del cúmulo de actividades que esperan por ser ejecutadas.
Transformar este momento en tiempo de calidad que ayude a un acercamiento con Cristo y que de paso permita bajar la guardia en cuanto a ese mal humor o esa falta de empatía hacia los compañeros es algo lo suficientemente relevante para cambiar por completo el clima laboral y hacerte mucho más eficiente, todo a través de un acto tan sagrado e íntimo como lo es hablar con el Padre.